¿Por qué habéis decidido formar parte del Consorcio de Terapias Digitales y cuáles fueron los factores clave que os llevaron a tomar la decisión?
Desde Pfizer apostamos por la innovación sostenible, y en este sentido, el Consorcio de Terapias Digitales es una iniciativa con la que nos sentimos identificados desde el primer momento en aras de impulsar las terapias digitales en España garantizando el máximo rigor científico a la hora de ser utilizadas tanto por pacientes como por profesionales sanitarios. La innovación, también en el ámbito digital debe regirse por los máximos estándares de calidad.
Desde la perspectiva de socio promotor, ¿Cuál es el valor que obtenéis al formar parte del CDTx y cómo os ha beneficiado hasta ahora?
La posibilidad de conocer y compartir experiencias y lecciones aprendidas alrededor de las Terapias Digitales, tanto nacionales como internacionales, es uno de los principales retornos que obtenemos como miembros del CDTx. En paralelo, nos está permitiendo dar a conocer internamente qué son las terapias digitales y despertar el interés por conocer su evolución.
¿Qué iniciativas estáis llevando a cabo para impulsar el desarrollo y la adopción de las terapias digitales?
En Pfizer, se ha constituido una nueva unidad llamada “Digital Health & Medicines” focalizada en la búsqueda de soluciones digitales, que abarca desde herramientas de ayuda al diagnóstico y la atención remota, hasta las terapias digitales.
Si es posible, ¿podríais compartir alguna terapia digital específica en la que estéis trabajando actualmente o que hayáis lanzado al mercado? ¿Qué características y beneficios destacaríais?
Pfizer ya dispone de soluciones de ayuda al diagnóstico a disposición de la población, destacando ResApp (https://www.resapphealth.com.au/) que cuenta con el marcado CE, aunque no está aprobada en España todavía, y está probada en varios ensayos clínicos, y que consiste en el uso de inteligencia artificial para ayudar a identificar enfermedades respiratorias a través del análisis del sonido de la respiración y la tos. Asimismo, en Alemania, Pfizer ha lanzado recientemente una terapia digital reembolsable en colaboración con la compañía Selfapy, que utiliza técnicas CBT (cognitive behavioral therapy) para ayudar a los pacientes a gestionar el dolor crónico.
¿Cuáles consideráis que son las principales barreras para la adopción generalizada de las terapias digitales? ¿Qué medidas estáis tomando para superarlas?
Sin duda, el principal reto es dar a conocer qué son las terapias digitales y qué ventajas aportan a pacientes, profesionales sanitarios y a la propia administración sanitaria, haciendo hincapié en la evidencia científica que las respaldan y diferencian del resto de soluciones digitales que proliferan en el mercado.
Por último, agradeceríamos que redactarais un breve quote inspiracional que resuma vuestra visión sobre el potencial de las DTx.
Las Terapias Digitales permiten elevar la salud digital a la categoría de medicamento, cumpliendo con las expectativas depositadas en la digitalización como un instrumento de mejora de nuestra sociedad, y señalando un futuro y desarrollo en beneficio de los pacientes que aún no alcanzamos a vislumbrar.
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