¿Por qué habéis decidido formar parte del Consorcio de Terapias Digitales y cuáles fueron los factores clave que os llevaron a tomar la decisión?
No cabe duda de que, las terapias digitales suponen una de las innovaciones sanitarias más disruptivas de los últimos tiempos. Fieles a nuestro propósito por mejorar la vida de generaciones presentes y futuras, desde Boehringer Ingelheim decidimos sumarnos desde el primer momento a esta iniciativa para avanzar en la regulación y facilitar el acceso de los pacientes a este tipo de terapias. Un objetivo que solo se puede conseguir mediante la colaboración público-privada entre los distintos actores del ecosistema sanitario. Un propósito que el Consorcio DTx ha mantenido desde su fundación y que desde la compañía compartimos en su totalidad.
Desde la perspectiva de socio promotor, ¿Cuál es el valor que obtenéis al formar parte del CDTx y cómo os ha beneficiado hasta ahora?
Formar parte del Consorcio DTx nos brinda una oportunidad única de colaborar estrechamente con diferentes actores relevantes del ecosistema sanitario, en materia de terapias digitales. Sin lugar a duda, una posición privilegiada para entender las necesidades del sistema, ver qué retos debemos sortear y así desarrollar soluciones que faciliten y maximicen el acceso de los pacientes a estas innovaciones terapéuticas digitales, con el fin de mejorar su calidad de vida.
La participación de la compañía como socio promotor en el CDTx refuerza nuestro posicionamiento como líder en el ámbito de la salud y demuestra nuestro compromiso con la mejora del acceso a tratamientos digitales innovadores.
En relación con las terapias digitales, ¿Cuáles son los principales retos que abordáis como compañía?
La era de la salud digital ya ha llegado e influirá significativamente en la prestación de atención médica a nivel mundial. Desde Boehringer Ingelheim promovemos el acceso a las terapias digitales y a la innovación de forma homogénea en el conjunto de la UE. El mundo de la salud está cambiando y entendemos la necesidad de la transformación necesaria por parte de todos los agentes clave en el sistema para aportar todo nuestro valor, pensando en el bienestar de los pacientes. Las tecnologías digitales ofrecen nuevas formas de ayudar a los pacientes y creemos que es fundamental que avancen los sistemas en esa línea para potenciar la innovación sanitaria, con el desarrollo y comercialización de nuevas soluciones de atención médica. Nuestra estrategia de salud digital pretende ser un marco común para construir un Sistema Nacional de la Salud robusto, eficaz, resiliente, inclusivo y sostenible, gracias a la capacidad transformadora de las tecnologías digitales.
Así pudimos debatir sobre ello en nuestra participación por segundo año consecutivo en el espacio dedicado a la salud digital en el 4YFN del MWC. Expertos de primer nivel en la materia nos acompañaron y juntos debatimos sobre el potencial de la Inteligencia Artificial (IA) en la transformación del sector de la salud con dos mesas debate: ‘cómo preparamos nuestros sistemas sanitarios para integrar la IA’, y ‘el impacto actual de la IA en la atención sanitaria’. El debate puso de relevancia la necesidad de creación y adaptación de nuevos marcos regulatorios para la IA en salud, así como la colaboración para facilitar la evaluación y financiación de soluciones digitales que incorporen IA. Todo ello, teniendo en cuenta la perspectiva del paciente y cómo han influido estos cambios en su recorrido sanitario y su interacción con el sistema.
¿En qué áreas terapéuticas se están posicionando vuestras terapias digitales? ¿Qué os impulsó a elegir estas áreas?
En Boehringer Ingelheim, tenemos integrado en nuestro ADN la innovación. Nuestra misión es aportar valor a través de la innovación. En materia de salud digital queremos establecernos como líderes en salud mental y precisión psiquiátrica. Con casi mil millones de personas en todo el mundo que viven con una enfermedad mental crónica y compleja, nuestra compañía se compromete a largo plazo para transformar el panorama de la salud mental [1].
Tomando este enfoque estratégico, queremos diseñar tratamientos que tengan el potencial de abordar la biología del cerebro con síntomas específicos. Tenemos un pipeline innovador y principios activos asociados que representan oportunidades para hacer de la psiquiatría de precisión una realidad, solventando así necesidades médicas no cubiertas en el campo de la salud mental. Creemos que este abordaje va más allá de la toma de un fármaco específico y necesita un enfoque colaborativo, holístico y centrado en los pacientes. Por ello trabajamos con diversos partners afines que comparten nuestra visión.
Nuestro objetivo es ofrecer un apoyo global mediante la detección precoz de la enfermedad, intervenciones psicológicas y sociales continuadas y terapias digitales para las personas que padecen enfermedades de salud mental crónicas y complejas. A través de nuestra red de colaboradores, nos esforzamos por mejorar las prácticas cotidianas en esta materia, compartiendo nuestros hallazgos colectivos. Esperamos aliviar la carga con la que conviven los pacientes con enfermedades de salud mental, así como sus cuidadores, familiares y la sociedad.
¿Cuáles son las oportunidades y desafíos que visualizáis en el campo de las terapias digitales para los próximos años? ¿Cómo veis el futuro de estas en de vuestras áreas terapéuticas?
Las terapias digitales son el futuro, ya que permiten asegurar a los pacientes, intervenciones terapéuticas basadas en la evidencia, impulsadas por programas de software, que sirven para prevenir, manejar, aliviar o tratar un trastorno médico o una enfermedad. Sin embargo, el reto principal es que su acceso continúa siendo limitado en la mayoría de los países europeos. Con el fin de garantizar una correcta aplicación, el proceso de desarrollo y comercialización, incluida la autorización, la evaluación o la fijación de precio y reembolso, está sujeta a estándares, teniendo en cuenta que también existe una ausencia de financiación, de armonización en los requisitos reglamentarios y de evidencia científica entre los distintos miembros de la UE. En este sentido, es importante trabajar conjuntamente entre los distintos países para mejorar el acceso a estas terapias. Es importante hacerlo apoyando el intercambio de datos y construyendo una infraestructura que maximice el potencial generado por estas nuevas tecnologías. Los expertos coinciden en que el modelo alemán podría ser aplicable a otros países. Sin embargo, apuntan también la necesidad de cambiar el modelo actual para que la innovación, de la mano de las soluciones que proporcionan las start-ups, lleguen a los pacientes.
Adicionalmente, es necesario crear un modelo de negocio común y sostenible que permita a las start-ups, como agentes del ecosistema sanitario, desarrollar su innovación y hacerla accesible a los pacientes. En este sentido, se ha destacado la importancia de la implicación de los profesionales sanitarios para contribuir a una atención sanitaria más personalizada, así como de los propios pacientes.
En lo que respecta a la financiación de estas soluciones digitales, para que haya avances es fundamental que haya una colaboración conjunta y unificada por parte de los sectores público y privado, así como de la comunidad política y resto de agentes implicados como profesionales y gestores sanitarios, organizaciones de pacientes, profesionales TIC, etc.). Si queremos facilitar un acceso equitativo a la innovación a todos los pacientes, es necesario crear ese marco común que agilice el proceso de evaluar, adoptar y financiar las soluciones digitales.
En lo que respecta a nuestras áreas terapéuticas creemos que, sobre todo en el campo de la salud mental, tenemos la posibilidad de combinar soluciones más tradicionales (fármacos) con otras más innovadoras (terapias digitales) para aumentar los beneficios de la farmacoterapia para estos pacientes. Nuestro foco siempre es el paciente, por lo que adoptamos un enfoque holístico que comprenda el tratamiento no solo como la toma de fármacos, sino como la búsqueda constante de nuevas terapias que mejoren su calidad de vida.
¿Qué iniciativas estáis llevando a cabo para impulsar el desarrollo y la adopción de las terapias digitales?
Nuestra compañía utiliza tecnologías digitales innovadoras a lo largo de toda la cadena de valor farmacéutica, con el propósito de transformar la vida de las generaciones. Este objetivo de digitalización queda patente en las 3 áreas que tenemos en España y que dan servicio a toda la corporación a nivel mundial: el IT Hub, que optimiza servicios tecnológicos e informáticos; el Centro Global de Servicios de Asuntos Regulatorios, que da soporte en los procesos de registro y reevaluación de productos de uso humano y veterinario y el equipo de servicios de marketing digital, que da soporte a la promoción de medicamentos. Además, contamos con un laboratorio digital conocido como BIX en nuestra central en Alemania, que actúa como incubadora innovadora, donde probamos y desarrollamos productos y soluciones digitales innovadoras en el cuidado de la salud. Y desde España además, un equipo de más de 160 personas conforman el equipo de I+D+i.
Si es posible, ¿Podríais compartir alguna terapia digital específica en la que estéis trabajando actualmente o que hayáis lanzado al mercado? ¿Qué características y beneficios destacaríais?
Una de las terapias de salud mental que estamos desarrollando, en colaboración con Click Therapeutics, es CT-155, que combina múltiples intervenciones terapéuticas, clínicamente validadas, para ayudar a los pacientes con esquizofrenia a modificar su comportamiento. Esta herramienta utiliza mecanismos cognitivos y neuro conductuales con el objetivo de reducir los déficits cognitivos y el deterioro del funcionamiento social en pacientes con esquizofrenia. Esta solución nace de la necesidad de crear una terapia coherente y de fácil acceso que aborde específicamente los síntomas negativos de la esquizofrenia como el retraimiento emocional, la falta de placer, el aislamiento social o la desconexión de la vida cotidiana. Además, tiene el potencial de ser prescrita junto con medicamentos, actualmente en pipeline, para mejorar el beneficio de la farmacoterapia.
Del mismo modo, estamos desarrollando, junto a Bayoomed/Bayoonet, un software de intervención en el cambio de comportamiento llamado Airology, que puede ayudar a pacientes con EPOC a autogestionar la adopción de actitudes clínicamente recomendadas para reducir la disnea.
¿Cuáles consideráis que son las principales barreras para la adopción generalizada de las terapias digitales? ¿Qué medidas estáis tomando para superarlas?
Como ya hemos comentado, aunque las terapias digitales ofrecen un gran potencial en el campo de la atención médica, también se enfrentan a grandes retos para que su adopción sea generalizada. Algunas de las barreras clave son la compleja regulación y aprobación, la necesidad de establecer modelos de reembolso viables, la capacitación insuficiente de profesionales de la salud o la falta de interoperabilidad y estándares.
En un mundo con crecientes incertidumbres geopolíticas y sociales, el enorme potencial de la innovación en el ámbito digital representa una oportunidad para una efectiva transformación del sistema sanitario y garantizar una mejor atención y experiencia para los pacientes. En este sentido, la IA por ejemplo, está desempeñando un papel cada vez más relevante, permitiendo a los gestores y profesionales de la salud tomar decisiones más informadas y precisas. Abrazar las innovaciones tecnológicas disruptivas, cambiar mentalidades y adoptar nuevos modelos de negocio es clave, siempre poniendo a los pacientes en el centro, y con un elevado compromiso con la calidad, el impacto, y el progreso científico y social.
Para afrontar este contexto, estamos comprometidos con el trabajo conjunto de la mano de las autoridades regulatorias para asegurar un equilibrio entre innovación y seguridad. Somos más de ver oportunidades, por ello, estamos además invirtiendo en investigación clínica para respaldar la eficacia de nuestras terapias digitales. Nuestro objetivo es allanar el camino para una adopción más amplia y exitosa de las terapias digitales, mejorando así la atención médica y la calidad de vida de los pacientes.
Por último, agradeceríamos que redactarais un breve quote inspiracional que resuma vuestra visión sobre el potencial de las DTx.
“El cuidado de las enfermedades en el futuro se encuentra más allá de los fármacos tradicionales. Con las terapias digitales, podemos explorar un mundo de posibilidades, basado en nuevas tecnologías y algoritmos, que nos pueden brindar soluciones más rápidas, eficientes y seguras para mejorar la calidad de vida de los pacientes”.
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